Yo tenia 7 años cuando mi papa me enseño el acorde de Sol en la guitarra. En ese mismo instante me transporte a un lugar magico donde nadie podia alcanzarme. En donde podia perderme por horas sun que nadie de diera cuenta que estaba ausente de la vida real por un tiempo. Ahi encontraba yo una satisfacion y mi mente se enamoro de ese lugar. Hoy ya ase 35 años sigo todavia maravillado cada vez que me traslado a ese lugar. La diferencia hoy es que no estoy solo ni perdido. A diario me encuentro ahà con mi Jesús. Y paso tiempo Ãntimo con el, le canto, platicamos, me dice palabras que aveces pongo con musica y se convierten en canticos. Y luego me entristeco porque me voy de ese lugar en donde estamos El y yo pero con la urgencia de volver pronto ahÃ. Pero mi Jesús es tan bueno que el se va conmigo de ese lugar. Y esta conmigo todo el tiempo. El prometio estar con nosotros hasta en fin
Daniel Martinez